Handling your success
En la era de la automatización, la capacidad de fabricar gran cantidad de piezas de un producto en poco tiempo ya no es suficiente para obtener una ventaja competitiva. Esto se debe a la complejidad de las demandas de los clientes y a la variedad de productos que actualmente están disponibles en el mercado. También los sectores del envasado y de la automatización de final de línea se han tenido que adaptar a las exigencias tecnológicas de las empresas impuestas por los rápidos cambios del mercado: durante el proceso de producción se deben paletizar diferentes tipos de productos en una sola jornada laboral, con lotes cada vez más pequeños y formatos diferentes. El cambio de formato es un procedimiento cada vez más frecuente en el mundo de la industria, y el aumento de los pedidos personalizados de los clientes requiere la máxima flexibilidad en las plantas de producción.
Implantar un cambio de formato automático eficaz e inteligente puede optimizar todo el proceso de automatización de final de línea.
Por una parte, el mercado ha evolucionado, pasando de producciones con lotes muy grandes a pedidos cada vez más pequeños y diferenciados. Por otra, el cambio de formato supone un tiempo muerto: la máquina está parada y, mientras se cambia el equipamiento, el trabajo se queda en stand-by. Conseguir reducir o eliminar estos tiempos muertos puede aumentar la eficacia de toda la línea y, por consiguiente, la rentabilidad general. Por este motivo, los fabricantes y las máquinas de éxito hoy deben tener la capacidad de gestionar el cambio de formato automático y de configurar todos los formatos actuales para entregar el producto exacto que ha solicitado el cliente, pero también cualquier posible variante que se pudiera pedir en un futuro. Las unidades inteligentes se utilizan para ajustar automáticamente el cambio de formato de forma rápida, flexible y sumamente eficaz.
La tendencia a la personalización de los productos y al embalaje cada vez más flexible está destinada a crecer aún más, y el cambio de formato integrado con la automatización de final de línea ofrece una importante ventaja competitiva en la producción. Velocidad, seguridad y precisión son solo algunas de las ventajas de las soluciones automáticas frente al trabajo manual. A continuación vemos en detalle todas las ventajas del cambio de formato automático.