Handling your success
La pandemia de Covid-19 ha tenido un impacto global devastador y sin precedentes. La histórica crisis sanitaria y económica que ha afectado a todo el planeta ha obligado a las industrias de todo el mundo a reinventarse y a revolucionar sus cadenas de producción: este es el contexto donde se sitúan los sistemas de paletizado automático y todo el sector de la automatización industrial.
Un paletizador automático permite alinear y organizar en palés productos y paquetes de diferentes formas y tamaños, para luego embalarlos y almacenarlos o transportarlos de forma segura hasta su destino. Provisto de un brazo mecánico para mover la mercancía y hecho a medida para satisfacer las necesidades de cada cliente, el paletizador automático ofrece un servicio sumamente flexible y personalizable.
Pero ¿cómo pueden los sistemas de paletizado convertirse en el as en la manga de las industrias manufactureras, incluso en momentos difíciles como el de una emergencia sanitaria? Según una reciente encuesta de Forbes para conocer la opinión de 450 administradores delegados, los sistemas de paletizado automático y, más en general, todos los procesos de automatización industrial han sido la verdadera clave para que las empresas pudieran hacer frente a la pandemia.
La expansión de la Covid-19 y la evolución continua de la situación pandémica han puesto a dura prueba a las empresas manufactureras de todo el mundo y, como ocurre a menudo, la crisis ha traído consigo una serie de cambios con los que tendremos que convivir durante mucho tiempo o incluso para siempre. Las empresas se han visto obligadas a detener la producción y a cambiar los procedimientos en sus instalaciones para garantizar la seguridad de sus trabajadores. La emergencia sanitaria ha impulsado la aplicación de nuevas herramientas y nuevos sistemas de automatización, y las empresas han entrado en una nueva fase de vida caracterizada por operaciones más seguras, más productivas y más resistentes.
En un momento en el que el contacto entre las personas se ha convertido en un peligro para la salud y el trabajo remoto cada vez es más perentorio, gestionar la productividad a distancia es posible gracias a sistemas de automatización como el paletizado automático, que hoy ya se consideran elementos clave para alcanzar posiciones de liderazgo durante la etapa de pospandemia.
El uso de un paletizador automático ha hecho posible que muchas empresas manufactureras garantizaran la continuidad de las líneas incluso durante los periodos más difíciles de la gestión de la pandemia, a la vez que han permitido mantener la distancia social y no detener la producción. Al no necesitar la presencia de un operador, los sistemas de paletizado automático han tenido un impacto positivo en la demanda durante la pandemia, también en previsión de un periodo de tiempo que podría ser muy superior al de una emergencia aislada.
La crisis de la Covid-19 ha generado un aumento espectacular de la demanda de productos farmacéuticos, con la consiguiente necesidad de eliminar los márgenes de error y de reducir todos los plazos relacionados con la cadena de suministro de productos. En este contexto, que posteriormente se extendió a otros sectores como la alimentación, la automoción y muchos otros, el uso de un paletizador automático ha marcado la diferencia y ha contribuido a la supervivencia y al éxito de muchas empresas, aumentando la velocidad de los procesos de embalaje y reduciendo el tiempo de transporte de las mercancías.
Estas son las razones que han impulsado y siguen impulsando a muchos fabricantes a invertir cada vez más en sistemas de paletizado automático, en la óptica de una industria cada vez más orientada hacia las tecnologías HMI, el aumento de la producción y la reducción al mínimo de los tiempos de inactividad.
La respuesta a la emergencia por la Covid-19 ha acelerado la transformación digital de muchos sectores productivos, dado que la crisis también ha sido el motor que ha impulsado a las empresas a cambiar sus estructuras y métodos de trabajo para reducir el contacto entre los empleados, creando así la necesidad de contar con máquinas más avanzadas y de mayor rendimiento. Por ejemplo, con un paletizador automático ya no se necesitan varios empleados para manipular los palés, sino que una sola persona es la responsable de todo su recorrido.
Pero esto no es todo. El uso de sistemas de paletizado automático reduce los costes de mano de obra y permite una mayor independencia en caso de absentismo laboral de los trabajadores por enfermedad o por negarse a trabajar en condiciones de riesgo para la salud. Además, con estos sistemas automatizados se reducen drásticamente los gastos de almacén: la venta (y, por consiguiente, el beneficio) se puede realizar inmediatamente después de la fase de producción sin pasar por el depósito en el almacén, ya que se tienen a disposición herramientas para embalar y cargar la mercancía en los camiones a medida que se produce.
La transición de un modelo de tipo Producción – Paletizado – Almacenamiento a un modelo de tipo Producción – Paletizado – Envío y venta ya ha empezado.